domingo, 3 de junio de 2012

Carta a la Soledad

Estimada:
                 Por un momento pensé que estos días serían como los que han pasado, tantos momentos felices que pasamos, tantas caricias de cariño y afecto, por no decir amor, pero todo eso al parecer llegó a su fin.


                 Hoy hice las cosas que habíamos planeado hacer, fui al cine como habíamos quedado, vi la película que íbamos a ver, aunque ya la habías visto antes, habías dicho que no te molestaba verla de nuevo ya que yo no la había visto. Fue entretenida no lo niego, pero no tenía compañía alguna, a mi lado solo había un asiento vacío, un asiento que no fue usado en toda la película, aunque la sala estaba llena.


                 Al salir pasé por aquel lugar donde venden helados deliciosos, no quise entrar... pensaba ir ahí contigo después del cine. Caminé varios minutos por un parque hermoso, el viento que soplaba y las hojas que caían de los árboles le daban un toque magnífico al lugar.


                 Unas lágrimas lograron escapar de mis ojos al pensar que quizás estas haciendo el mismo recorrido con el, aquel que no supo apreciar a la hermosa persona que tenía a su lado, aquel que luchó por tenerte y tras lograrlo no hizo nada para mantenerte a su lado.


                 Todos aquellos momentos que pasamos juntos están clavadas en mi mente, percibo tu aroma en casi todos lados, tu imagen se ha quedado impresa en mi corazón. Mis sentimientos son reales, me mostré ante ti sin máscara alguna, revelándote mi más profundo ser, aquel ser que nadie ha visto completamente.


                 Varias personas me han dicho cosas horribles, pero no quiero pensar ni creer nada de eso, no quiero saber que tan solo fui una entretención pasajera, que todas esas caricias, gestos y palabras de cariño y amor que me decías eran mentiras, que aquella canción que me dedicaste no significa nada.


                 Te seguí por varios años, soporté que estuvieras con otras personas tratando de ser solo un amigo más, pero en estos meses que han pasado no pude ocultarlo más, te revelé mi más grande secreto, aquel secreto que nadie sabía. Siempre te quise, te amaba en secreto, y ahora que has vuelto con el, hay un vacío en mi corazón.


                 Tal ves debería seguir mi camino y olvidarme de todo, pero por más que quiera no puedo porque... aunque lo creas o no, te sigo amando.

2 comentarios:

Deleyda Gilraen dijo...

Que profundo, es difícil pararse en el mundo entero y saber hacia donde vas, con quien estas... Pero a veces quien te busca no es a quien tu buscas...
No soy quien para darte semejante consejo, mejor olvídalo, un beso cuídate.

Te Quiero.

Deleyda Gilraen dijo...

Ánimos... Yo se que es difícil pararse en el mundo y saber a donde estas y con quien vas...
A veces quien te busca no es a quien tu mismo buscas, pero no soy quien para darte semejante consejo, un beso Alastor, cuídate

Te Quiero!